Su inmejorable ubicación en la zona costera del sureste de Mallorca, entre los encantadores pueblos de Alquería Blanca y Puerto Colom, la sitúa cerca de hermosas calas como Cala Egos, Cala Serena y Cala Ferrera. Además, la proximidad al prestigioso campo de golf Vall d'Or la convierte en la casa ideal para disfrutar tanto del campo como de sus alrededores. Casa principal de piedra formada por dos edificaciones. Dispone de 345 m2 construidos que se distribuyen en 2 plantas. La fachada principal, con tonos ocres y blancos en las ventanas, le otorga un carácter único. El uso de madera en las vigas vistas y en toda la carpintería, así como el barro en el suelo, refuerzan el estilo rústico. La puerta de entrada, de madera original y con una forma redonda, destaca el estilo típico de las casas mallorquinas.
Al entrar, encontramos un gran recibidor que nos lleva a una cocina con elementos antiguos y a un comedor con salida al porche. También dispone de un salón de lectura que conduce a un amplio y luminoso salón con chimenea. En esta planta baja, hay un dormitorio espacioso con vistas al jardín y otros dos dormitorios con dos baños.
Una amplia escalera nos lleva al piso superior, donde se encuentra un gran dormitorio con maravillosas vistas y una encantadora sala de juegos.
La propiedad cuenta además con una casa de invitados de 98m2 que dispone de un salón-comedor con chimenea, cocina, baño y un dormitorio. Una zona cubierta para los coches y un almacén de 40 m2.
En el jardín, no faltan las plantas y árboles que conectan con la tradición del campo mallorquín, como granados, higueras, y rincones adornados con buganvillas, adelfas e hibiscos. Junto a ellos, se encuentra una piscina ovalada que completa este encantador espacio exterior. Un lugar perfecto para disfrutar de la tranquilidad y la belleza del campo junto a las calas del sureste.